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Un paso hacia un cambio sostenible

El balón intragástrico es un dispositivo médico que ocupa aproximadamente el 50% del estómago, ayudando a generar una sensación de saciedad precoz. Acompañado de un tratamiento multidisciplinario y ajustes en el estilo de vida, facilita la pérdida de peso de manera efectiva y sostenida. Es una alternativa mínimamente invasiva para quienes buscan iniciar su transformación metabólica sin recurrir a cirugía.

Tipos de Balón Intragástrico

Existen diferentes opciones de balón intragástrico, adaptadas a las necesidades de cada paciente:

1. Endoscópicos:

  • Orbera: Duración de 6 meses.
  • Spatz3: Duración de 12 meses. Único balón reinflable y ajustable.

2. Ingeribles:

  • Allurion: Duración de 4 meses. El único balón que se expulsa por sí solo.

Resultados Esperados

  • Pérdida de entre el 10% al 25% del exceso de peso.

Ventajas

  • Ideal para personas con sobrepeso (IMC <30) o pacientes con alto riesgo quirúrgico que necesitan perder peso antes de una cirugía mayor.
  • Procedimiento mínimamente invasivo, sin incisiones ni cirugía.
  • La colocación endoscópica dura aproximadamente 30 minutos.
  • No requiere hospitalización.
  • Procedimiento reversible.

Consideraciones

  • Es una solución temporal.
  • No tiene efectos metabólicos, solo mecánicos.
  • Existe riesgo de reganancia de peso si no se acompaña de cambios en el estilo de vida.
  • Resultados limitados en casos de obesidad mórbida o enfermedades metabólicas como resistencia a la insulina o hipotiroidismo.
  • Los balones endoscópicos requieren un segundo procedimiento para su retiro al finalizar el tratamiento.

El Balón Intragástrico es una buena herramienta cuando se combina con un enfoque integral hacia la salud. Con el acompañamiento adecuado, puede ser el primer paso hacia una mejor calidad de vida.